El Paciente Simulado en el ámbito formativo.
La formación en el ámbito sanitario es de vital importancia para garantizar la seguridad y calidad en la atención al paciente. Una técnica cada vez más utilizada en la educación de los profesionales de la salud es el uso de pacientes simulados, también conocidos como actores o pacientes estándar. Esta herramienta de aprendizaje, junto con el teatro aplicado, puede mejorar exponencialmente la formación en el ámbito sanitario. En este artículo, exploraremos cómo el uso de pacientes simulados puede mejorar la formación en salud y cómo el teatro aplicado puede ayudar a potenciar aún más esta técnica.
Simulación en la formación sanitaria
La simulación es una técnica de enseñanza que se utiliza en muchos campos, incluyendo la medicina y la enfermería. Los pacientes simulados son personas entrenadas para representar a pacientes con diferentes condiciones médicas, desde problemas de salud mental hasta enfermedades crónicas. La idea detrás de los pacientes simulados es que los estudiantes de la salud pueden practicar y desarrollar habilidades de comunicación, diagnóstico y tratamiento en un ambiente seguro y controlado antes de trabajar con pacientes reales.
Los pacientes simulados se utilizan cada vez más en la formación sanitaria porque permiten a los estudiantes experimentar situaciones clínicas reales sin poner en riesgo a los pacientes reales. Además, los pacientes simulados pueden ser programados para presentar diferentes escenarios clínicos, lo que permite a los estudiantes practicar una amplia variedad de habilidades. Por ejemplo, un paciente simulado puede ser programado para simular una crisis cardíaca, permitiendo a los estudiantes practicar la atención de emergencias cardíacas y la reanimación cardiopulmonar.
El uso de pacientes simulados puede mejorar exponencialmente la formación en el ámbito sanitario, ya que permite a los estudiantes practicar y desarrollar habilidades de manera segura y controlada antes de trabajar con pacientes reales. Además, los pacientes simulados pueden ser programados para presentar una amplia variedad de escenarios clínicos, lo que permite a los estudiantes practicar una amplia variedad de habilidades. Sin embargo, la simulación por sí sola no es suficiente para garantizar una formación de calidad en salud. Se necesita una técnica adicional para potenciar los efectos de la simulación.
El teatro aplicado en la formación sanitaria
El teatro aplicado es una técnica de enseñanza que se utiliza en la formación sanitaria para ayudar a los estudiantes a desarrollar habilidades de comunicación, trabajo en equipo y empatía. En el teatro aplicado, los estudiantes interactúan con actores profesionales para explorar situaciones clínicas complejas y desafiantes. La idea detrás del teatro aplicado es que el aprendizaje es más efectivo cuando se involucra a los estudiantes en situaciones complejas y emocionalmente desafiantes.
El teatro aplicado es particularmente efectivo en la formación sanitaria porque ayuda a los estudiantes a desarrollar habilidades de comunicación y empatía. Los estudiantes aprenden a escuchar activamente, a comprender las necesidades de los pacientes y a trabajar en equipo para encontrar soluciones efectivas. Además, el teatro aplicado puede ayudar a los estudiantes a desarrollar habilidades de liderazgo y toma de decisiones, lo que es fundamental para garantizar la seguridad y calidad en la atención al paciente.
La Miranda Teatro y el paciente simulado.
Desde nuestra compañía hemos investigado en este campo pues creemos en la capacidad del teatro como elemento de mejora en las competencias clave de las personas y además en el campo profesional, sabemos que nuestros pacientes simulados ayudan a aprender a futuros profesionales del ámbito sanitario.
Si necesitas o quieres experimentar esta figura, no dudes en ponerte en contacto con nosotras.
De momento te dejamos la grabación de Martín, un caso simulado para la Universitat de València en el marco de innovación pedagógica donde andamos colaborando.